Escrito por: Steve Moeller Jan 09, 2018
Traducido por: Grace Frank Método Grief Recovery Méxio











El Duelo Trans-generacional, algunas veces llamado Trauma Trans-generacional, se refiere a las situaciones en las que un evento de duelo es tan poderoso dentro de una familia, que se pasa a la siguiente generación y, en ocasiones hasta muchas generaciones después de ésta. En un sentido verdaderamente real, este es el regalo que “sigue tomando” que se puede pasar a través de una familia.

Las tres situaciones culturales en las que esta forma de Duelo Privado de Derechos que han sido más frecuentemente discutidas tiene que ver con:

• Los integrantes de la Primera Nación de Canadá, Las Tribus Nativas Americanas y Los Pueblos Indígenas de Alaska. Estas sociedades tuvieron que manejar la “invasión” de inmigrantes que se consideraban a sí mismos como “más avanzados culturalmente”. En muchos casos, estos nuevos colonos, y los gobiernos que los apoyaban, minimizaron el valor de estas culturas nativas y pusieron a los niños nativos dentro de escuelas basadas en la cultura occidental que prohibían la práctica de las tradiciones nativas, incluyendo el habla de idiomas nativos. Muchas de estas personas tenían un sentimiento profundo de duelo por la pérdida de su herencia cultural, que había sido pasado de generación en generación. Solamente hasta el pasado reciente se han rediseñado las “Escuelas Indígenas” para celebrar esa herencia. Tristemente, a pesar de las reformas, el daño estaba hecho en generaciones pasadas y todavía impacta profundamente a esas poblaciones nativas actualmente. Los altos índices de abuso de substancias, suicidio, y de un sentimiento de desesperanza están bien documentados dentro de muchas de las reservaciones de Nativos Americanos.
• Sobrevivientes del Holocausto y sus familias han sido identificados también como un grupo que todavía continúan manejando Duelo Trans-generacional. El profundo sentimiento de pérdida sentido por aquellos que sufrieron los horrores de los campos de concentración son inimaginables para los que no vivieron esa experiencia. Cuando esos sobrevivientes tuvieron hijos después de su liberación, es entendible que compartieran sus historias descorazonadoras con ellos, sin darse cuenta de la continuidad del duelo y el impacto emocional que les inculcaban. Los estudios han demostrado una mucho más alta tasa de dependencia en la Consejería Terapéutica entre las generaciones subsecuentes de aquellos que vivieron a través del holocausto que dentro de la población en general, ya que estas personas siguen manejando los horrores, miedos y pérdidas inculcadas en ellos por sus padres
• Esta forma de duelo se ha notado también entre aquellos que han sufrido la pérdida de un niño(a). Después de pasar por esta experiencia trágica, estos padres son mucho más protectores de sus otros hijos, algunas veces hasta inculcarles sus miedos de otra pérdida de ese tipo al sistema de creencias de sus hijos. Cuando este miedo se instala profundamente, se puede pasar a la siguiente generación, cuando estos niños sean padres a su vez

Más allá de estos tres grupos, hay otros que han sido identificados como víctimas potenciales de esta forma de dueto también. Un Santa Claus de banqueta, en Nueva York, se dio cuenta que después del ataque del 11 de septiembre, los padres eran mucho más cuidadosos al permitir a sus hijos acercarse o tener contacto con él. En una palabra, este es un ejemplo del creciente concepto de “desconocido peligroso” que les transmitimos a nuestros hijos, sin darnos cuenta de las ramificaciones a largo plazo que esto puede tener.
Esta la famosa historia del pleito entre los Hatfields y los Mccoys, que empezaron su pelea en Kentucky en los 1800’s tardíos. Mientras que la generación más vieja era la que estaba peleada entre ellos, el duelo subsecuente de ese pleito fue pasado de generación en generación. Hay naciones, y segmentos culturales dentro de las naciones, que han estado peleados entre ellos por muchas generaciones alrededor del mundo. Esto es evidente particularmente en el Oriente Medio y África, pero no está restringido de otras regiones geográficas. Los sentimientos de duelo y pérdida han sido pasados a generaciones subsecuentes y continúan alimentando el fuego del odio y la guerra.
Puede ser que el concepto de Duelo Trans-generacional se haya identificado recientemente, pero difícilmente es único dentro de las últimas generaciones de la humanidad. Durante la conquista española de América Central, y los monjes que la siguieron, destruyeron todos menos cuatro de los códices Mayas, en un esfuerzo de convertir a la población y eliminar lo que ellos veían como “prácticas heréticas” y tradiciones. La verdadera historia de esta civilización tenía un avanzado lenguaje escrito, habilidades matemáticas y un avanzado conocimiento astronómico, que se está redescubriendo recientemente. La pérdida de la historia de su cultura se ha sentido por cientos de años por estas personas y ha sido pasado a las generaciones futuras. El concepto de tratar de borrar la historia cultural era una práctica común de los poderes coloniales a través de la historia mundial, y ha sido una fuente vigente de Duelo Trans-generacional.

Ahora que lo hemos identificado, ¿que se puede hacer para ayudar a estos dolientes?

Nadie ha desarrollado una máquina del tiempo que pueda permitir que estos elementos de duelo sean manejados efectivamente en el pasado. Esto deja dos opciones a los dolientes: el continuar cargando por las pérdidas del pasado, o encontrar una forma de manejar este duelo y pasarlo a la siguiente generación.
Seguir la primera opción garantiza que no haya alivio y que el sufrimiento continuo sea inevitable.

Ya que no hay manera de cambiar las cosas malas que sucedieron en el pasado, y que continúan impactando negativamente a estos dolientes, existe la opción de llevar a cabo acciones positivas y efectivas de recuperación del duelo. La decisión de tomar estas acciones no significa que estas personas decidan descontar ninguna de estas pérdidas pasadas. En su lugar, es tomar la decisión consciente de ir más allá de las ataduras de esas pérdidas pasadas y continuar con una perspectiva feliz hacia el futuro. Una vez que hayan manejado efectivamente su dolor emocional, se ponen en una mucho mejor posición para efectuar las acciones necesarias para asegurarse de que estas equivocaciones no sean perpetuadas en el futuro. Les puede dar la claridad de pensamiento necesaria para recapturar los elementos positivos de su familia o de su herencia cultural para pasarlos a las generaciones futuras. Les puede brindar la oportunidad de elevarse sobre dolor histórico y avanzar. Como dijo Viktor Frankl, sobreviviente del holocausto, “Se le puede quitar todo a un hombre, menos una cosa: la última de las libertades humanas – el escoger la actitud propia ante cualquier conjunto de circunstancias, el escoger el camino propio.”
El Método Grief Recovery ofrece los medios efectivos para tomas esta acción para manejar el dolor emocional del duelo trans-generacional. No solamente les da a las personas la oportunidad de dirigirse al evento original que en principio disparó este duelo, sino también las herramientas para manejar el duelo de recibir este dolor transmitido a ti desde generaciones pasadas de tu familia.
Este acercamiento está descrito en el “Manual Superando Pérdidas Emocionales” que puedes usar solo o con la ayuda de un Especialista Certificado entrenado por el Instituto Grief Recover . La ventaja de trabajar con especialista es que tendrás a una persona capacitada a tu lado para ayudarte a tomar los pasos activos descritos por los autores.
A diferencia de muchos otros libros sobre duelo y pérdida, este contiene un plan de acción verdadero. Los autores te guiarán en este viaje, explicándote con ejemplos de la forma en que ellos tomaron estas acciones. No es un libro con un conjunto de ejercicios intelectuales, sino uno que más habla a tu corazón roto. Maneja al duelo como una emoción natural, más que como una enfermedad, ofrece al lector la guía necesaria para manejar como impactó en su vida. El duelo puede ser abrumador en la manera en que limita la habilidad para vivir el día a día. Cuando ese duelo se ha implantado y reforzado de generación en generación, puede ser todavía peor. Te puede dejar sintiéndote sin opciones más allá de continuar viviendo con ese dolor y el sentimiento de desesperanza. Puedes seguir siendo una víctima del pasado o puedes escoger ser un sobreviviente. El mayor regalo de tomar las acciones para ti mismo, es que también puedes detener este ciclo de transmitir el duelo trans-generacional a tu siguiente generación.
No puedes cambiar lo que pasó en el pasado. Sin embargo, puedes tomar las acciones para ti, para que lo que o quien haya causado dolor no controle más tu habilidad de ser la mejor persona posible.